En Bogotá, 300 niños sesionan como si estuvieran en asamblea de la ONU
Alumnos de 12 colegios asumen el rol de embajadores de distintas naciones.
La Universidad de la Sabana congrega desde el miércoles a 300 estudiantes de 12 colegios de Bogotá en el Cuarto Modelo de las Naciones Unidas (ONU).
En esta simulación de la asamblea de la ONU, los alumnos asumen el rol de embajadores de distintas naciones y, como tales, deben estar en capacidad de responder en inglés o en español los cuestionamientos que las delegaciones tengan para ellos.
Nubia Cano, organizadora del modelo, explica que "el esquema se divide en seis comisiones, cada una con un enfoque: consejo de seguridad, temas políticos, económicos, humanitarios y Unicef".
La simulación que se hace concuerda con lo que se vive dentro de una asamblea de la ONU, ya que niños de 11 a 17 años deben seguir normas protocolarias y diplomáticas. Y eso incluye, entre otras cosas, aprender a hablar y a vestirse de acuerdo con las exigencias de un evento de esta clase: los niños se presentaron de rigurosa corbata y, ellas, vestidas formalmente.
Como corresponde a estos escenarios, la temática incluyó desde el conflicto en Medio Oriente hasta el surgimiento de las armas biológicas.
Cada nación, con su pequeño embajador, defiende su punto de vista y puede, como parte del debate, aceptar o rehusar las decisiones en las que esté involucrado su país.
Andrea Rodríguez, estudiante de sexto grado del Colegio Anglo-Colombiano, destacó el valor de estos ejercicios; de hecho, los ve como una "preparación para beneficio del mundo en el futuro".
Ella,que fungió de embajadora de España, desempeñó en la simulación un papel importante en el programa humanitario de Pakistán.
La preparación de los alumnos dura alrededor de seis meses; en ella intervienen docentes que guían y colaboran con la construcción de argumentos válidos:
"Deben saber de historia, de actualidad e incluso aprender a perderle el miedo de hablar frente al público", explica Sergio Santos, secretario general del modelo.
La actividad, que tiene como meta formar mentes para transformar el futuro, finaliza hoy. Se premiarán el mejor discurso, la mejor comisión, al mejor delegado y los mejor vestidos.
En Bogotá, 300 niños sesionan como si estuvieran en asamblea de la ONU
Alumnos de 12 colegios asumen el rol de embajadores de distintas naciones.
La Universidad de la Sabana congrega desde el miércoles a 300 estudiantes de 12 colegios de Bogotá en el Cuarto Modelo de las Naciones Unidas (ONU).
En esta simulación de la asamblea de la ONU, los alumnos asumen el rol de embajadores de distintas naciones y, como tales, deben estar en capacidad de responder en inglés o en español los cuestionamientos que las delegaciones tengan para ellos.
Nubia Cano, organizadora del modelo, explica que "el esquema se divide en seis comisiones, cada una con un enfoque: consejo de seguridad, temas políticos, económicos, humanitarios y Unicef".
La simulación que se hace concuerda con lo que se vive dentro de una asamblea de la ONU, ya que niños de 11 a 17 años deben seguir normas protocolarias y diplomáticas. Y eso incluye, entre otras cosas, aprender a hablar y a vestirse de acuerdo con las exigencias de un evento de esta clase: los niños se presentaron de rigurosa corbata y, ellas, vestidas formalmente.
Como corresponde a estos escenarios, la temática incluyó desde el conflicto en Medio Oriente hasta el surgimiento de las armas biológicas.
Cada nación, con su pequeño embajador, defiende su punto de vista y puede, como parte del debate, aceptar o rehusar las decisiones en las que esté involucrado su país.
Andrea Rodríguez, estudiante de sexto grado del Colegio Anglo-Colombiano, destacó el valor de estos ejercicios; de hecho, los ve como una "preparación para beneficio del mundo en el futuro".
Ella,que fungió de embajadora de España, desempeñó en la simulación un papel importante en el programa humanitario de Pakistán.
La preparación de los alumnos dura alrededor de seis meses; en ella intervienen docentes que guían y colaboran con la construcción de argumentos válidos:
"Deben saber de historia, de actualidad e incluso aprender a perderle el miedo de hablar frente al público", explica Sergio Santos, secretario general del modelo.
La actividad, que tiene como meta formar mentes para transformar el futuro, finaliza hoy. Se premiarán el mejor discurso, la mejor comisión, al mejor delegado y los mejor vestidos.
Alumnos de 12 colegios asumen el rol de embajadores de distintas naciones.
La Universidad de la Sabana congrega desde el miércoles a 300 estudiantes de 12 colegios de Bogotá en el Cuarto Modelo de las Naciones Unidas (ONU).
En esta simulación de la asamblea de la ONU, los alumnos asumen el rol de embajadores de distintas naciones y, como tales, deben estar en capacidad de responder en inglés o en español los cuestionamientos que las delegaciones tengan para ellos.
Nubia Cano, organizadora del modelo, explica que "el esquema se divide en seis comisiones, cada una con un enfoque: consejo de seguridad, temas políticos, económicos, humanitarios y Unicef".
La simulación que se hace concuerda con lo que se vive dentro de una asamblea de la ONU, ya que niños de 11 a 17 años deben seguir normas protocolarias y diplomáticas. Y eso incluye, entre otras cosas, aprender a hablar y a vestirse de acuerdo con las exigencias de un evento de esta clase: los niños se presentaron de rigurosa corbata y, ellas, vestidas formalmente.
Como corresponde a estos escenarios, la temática incluyó desde el conflicto en Medio Oriente hasta el surgimiento de las armas biológicas.
Cada nación, con su pequeño embajador, defiende su punto de vista y puede, como parte del debate, aceptar o rehusar las decisiones en las que esté involucrado su país.
Andrea Rodríguez, estudiante de sexto grado del Colegio Anglo-Colombiano, destacó el valor de estos ejercicios; de hecho, los ve como una "preparación para beneficio del mundo en el futuro".
Ella,que fungió de embajadora de España, desempeñó en la simulación un papel importante en el programa humanitario de Pakistán.
La preparación de los alumnos dura alrededor de seis meses; en ella intervienen docentes que guían y colaboran con la construcción de argumentos válidos:
"Deben saber de historia, de actualidad e incluso aprender a perderle el miedo de hablar frente al público", explica Sergio Santos, secretario general del modelo.
La actividad, que tiene como meta formar mentes para transformar el futuro, finaliza hoy. Se premiarán el mejor discurso, la mejor comisión, al mejor delegado y los mejor vestidos.
En esta simulación de la asamblea de la ONU, los alumnos asumen el rol de embajadores de distintas naciones y, como tales, deben estar en capacidad de responder en inglés o en español los cuestionamientos que las delegaciones tengan para ellos.
Nubia Cano, organizadora del modelo, explica que "el esquema se divide en seis comisiones, cada una con un enfoque: consejo de seguridad, temas políticos, económicos, humanitarios y Unicef".
La simulación que se hace concuerda con lo que se vive dentro de una asamblea de la ONU, ya que niños de 11 a 17 años deben seguir normas protocolarias y diplomáticas. Y eso incluye, entre otras cosas, aprender a hablar y a vestirse de acuerdo con las exigencias de un evento de esta clase: los niños se presentaron de rigurosa corbata y, ellas, vestidas formalmente.
Como corresponde a estos escenarios, la temática incluyó desde el conflicto en Medio Oriente hasta el surgimiento de las armas biológicas.
Cada nación, con su pequeño embajador, defiende su punto de vista y puede, como parte del debate, aceptar o rehusar las decisiones en las que esté involucrado su país.
Andrea Rodríguez, estudiante de sexto grado del Colegio Anglo-Colombiano, destacó el valor de estos ejercicios; de hecho, los ve como una "preparación para beneficio del mundo en el futuro".
Ella,que fungió de embajadora de España, desempeñó en la simulación un papel importante en el programa humanitario de Pakistán.
La preparación de los alumnos dura alrededor de seis meses; en ella intervienen docentes que guían y colaboran con la construcción de argumentos válidos:
"Deben saber de historia, de actualidad e incluso aprender a perderle el miedo de hablar frente al público", explica Sergio Santos, secretario general del modelo.
La actividad, que tiene como meta formar mentes para transformar el futuro, finaliza hoy. Se premiarán el mejor discurso, la mejor comisión, al mejor delegado y los mejor vestidos.
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